lunes, 4 de abril de 2016

Nietzsche- Mas allá del bien y del mal

¿Queréis vivir <<de acuerdo con la naturaleza>>? ¡Que mentira encierra esa expresión vuestra, nobles estoicos! Imaginaos un ser como la naturaleza, inconmesurablemente derrochadora e indiferente, sin intenciones ni miramientos, sin piedad ni justicia, fecunda y estéril e incierta a la vez; imaginaos la indiferencia misma convertida en poder: ¿como podrías vivir con semejante indiferencia? Vivir, ¿no equivale precisamente a ser distinto de esa naturaleza? Vivir, ¿no es valorar, preferir, ser injusto, ser limitado, querer ser diferente? Y aceptando que vuestro imperativo de << vivir de acuerdo con la naturaleza >> equivalga, en ultima instancia, a <<vivir de acuerdo con la vida>>,¿como podrías dejar de vivir de este modo? ¿Por que convertir en principio algo que ya sois y que no tenéis mas remedio que ser?
La realidad es totalmente distinta: cuando fingís descifrar embelesados en la naturaleza del canon de vuestra ley, lo que estas deseando, extraños comediantes que os engañáis a vosotros mismos, es algo muy diferente. Vuestro orgullo pretende prescribir y proyectar incluso a la naturaleza vuestra moral , vuestro ideal; exigís que la naturaleza sea una naturaleza << conforme a la Estoa>>, y pretendéis que todo lo que existe solo se acomode a vuestra imagen, como una glorificación y una generalización gigantesca y eterna del estoicismo. A pesar de todo vuestro amor a la verdad, os constreñís de una forma tan obstinada y duradera, con una fijación hipnótica tal, a ver la naturaleza de un modo erróneo, es decir, de una manera estoica, que ya no sois capaces de verla de otro modo: y no se que profundisimo orgullo termina inspirándoos incluso la esperanza insensata de que, como sois capaces de tiranizaros ( el estoicismo equivale a una autotirania ), también la naturaleza se deja tiranizar, como si el estoico no fuera explicitamente una parte de la naturaleza.
Sin embargo, todo esto es una vieja y eterna historia. Lo que antaño sucedió con los estoicos sigue ocurriendo hoy en cuanto que una filosofía empieza a creer en si misma. Esta crea siempre el mundo a su imagen, por que no puede obrar de otra manera; la filosofía no es otra cosa que ese instinto tiránico, la voluntad de poder en su manifestación mas intelectual, de <<crear el mundo>>, de ser causa primera.

Nietzsche- Mas allá del bien y del mal

05-04-2016